Site Meter

21 de octubre de 2005

viernes

No soy ese desafortunado que se cuela en tu idea, tampoco, la idea dormilona que escucha tu inconsciente a toda hora, en cualquier canal, en todo momento. Soy algo más que eso: una uraña marca en tu inconsciencia y olvido, diré sólo olvido, porque no hay más, si  acaso, pequeñas muestras de indiferencia, cuasi ideas vagas de mi existencia o movimiento. Lo sabía desde que nací: soy la parte incongruente de un postulado social, soy, el parte menos clara de cualquier clausula o modelo de orden, amen de mi desorden. Sabía por tus reflejos, que no hay medio ni modo. Encontré en tus diminutas muestras de asco y repudio, cierta pasión por reanudarte en tu quehacer, lejos del mío, de mi idea, forma, carácter y condición asexuada, desunida, dividida... No importan las notas salvajes, los fonemas oblicuos y pusilánimes que se colaban en los intersticios mínimos de mi piel porosa y apagada; porque esas peripecias, se impregnaron en la nada, rasguñando el éter enrareciendolo con tu aroma de olvido, con ese calor polar que se endureció en mi resignación y que dejó marcas dobles. Lo que podría importar ahora, sera bien poco: una exclusividad de nulidades, eso, es lo que realmente tiene trascendentalismo, lo demás... es pura abstracción ingenua.
Send Me A MessageAudio Comentario